La Liga
Manuel Pellegrini afronta críticas tras el empate sin goles del Real Betis frente al Genk en la tercera jornada de la Europa League. Su decisión de hacer rotaciones masivas ha sido puesta en duda por gran parte de la afición.
Pellegrini justificó esos cambios afirmando que su plantilla permite alternar y que LaLiga sigue siendo la prioridad.
Pellegrini, las rotaciones y el desgaste europeo
Desde la llegada del chileno al Betis, ha mantenido una lógica: los partidos de jueves son para rotar, reservando fuerzas para los domingos en LaLiga.
Contra el Genk hizo hasta nueve modificaciones respecto al once anterior, buscando preservar frescura para el campeonato doméstico.
Sin embargo, esa decisión pasó factura: el equipo no tuvo profundidad ofensiva, fue previsible y careció de verticalidad en muchas fases del duelo.
Europa League: ¿competencia secundaria para Pellegrini?
El empate ante el Genk dejó al Betis con 5 de 9 puntos posibles, lejos de perfilar una clasificación holgada.
Pellegrini defendió que su equipo tuvo dominio territorial, pero admitió que le faltó creatividad para imponerse. “Nos faltó lucidez ofensiva”, dijo tras el partido.
La afición reprocha que el técnico ha priorizado el domingo durante años en copa y competiciones continentales. Ese enfoque benefició en la Conference, pero en Europa League los rivales son más exigentes.

El peso de las decisiones tácticas
En rueda de prensa, Pellegrini rechazó que las rotaciones desbalancearan al equipo: “Entró el equipo que tenía que jugar hoy”, comentó.
También defendió que no hubo falta de intensidad: “No se me ocurre reprochar eso”, apuntó, aunque reconoció que “no tuvimos la terminación para ejecutar el juego con profundidad”.
Por otro lado, el entrenador afirmó que el rival mereció su crédito defensivo: “El Genk se defendió muy bien, eso también es mérito suyo”.
Claves de esta decisión de Pellegrini
El actual calendario apretado obliga a equilibrar fuerzas. Pellegrini había advertido que la plantilla “permite hacer rotaciones”, y que en el club hay consenso respecto al enfoque.
Además, sabe que en LaLiga los puntos no se recuperan, por lo que prioriza garantizar rendimiento constante en el torneo local.
Cuando el Betis juega bien en Europa, los resultados acompañan; cuando falla creatividad, surgen dudas sobre si se está sacrificando demasiado por LaLiga.
El club también evalúa refuerzos para que los segundos espadas tengan más opciones en competiciones simultáneas.
El técnico reconoce que este tipo de partidos requiere equilibrio entre plantillas. “Siempre se quiere aspirar a un logro superior”, dijo.
El empate frente al Genk deja en evidencia que las decisiones de Pellegrini vuelven a ser objeto de debate. ¿Ha sido justa la rotación o se ha especulado con Europa?
En última instancia, el desgaste estratégico pesa más que el resultado mismo. Y si ese estilo continúa, la afición exigirá respuestas más claras del técnico.
Sin duda, Manuel Pellegrini enfrenta un dilema permanente: balancear LaLiga con la Europa League sin desatender ninguna de las dos. Y el partido ante el Genk expone esa tensión con claridad.
