La Liga
Mateu Alemany ya está en el Atlético de Madrid como nuevo director deportivo del primer equipo masculino, y su llegada marca un punto de inflexión en la planificación rojiblanca. El ejecutivo balear asumió sus funciones de forma oficial en octubre de 2025.
Mateu Alemany tiene claro que el principal objetivo del próximo mercado estival es asegurar la permanencia de Julián Álvarez. El joven delantero argentino se ha convertido en la piedra angular del proyecto atlético.
Mateu Alemany centra su proyecto en el Atlético de Madrid y Julián Álvarez
Según el propio club, Mateu Alemany asumirá la responsabilidad de la gestión deportiva, formación de plantilla y negociación de contratos en el Atlético de Madrid.
Dentro de ese rol, la prioridad absoluta es blindar a Julián Álvarez frente a intereses externos, y dotar al equipo de recursos para competir al máximo nivel. Fue incluso vinculado a una mejora salarial y una cláusula reforzada.
La apuesta del Atlético de Madrid bajo la dirección de Alemany se apoya también en la reciente inversión del fondo Apollo, que proporcionará músculo financiero para reforzar la plantilla.
Hoja de ruta y hoja de planificación deportiva
Mateu Alemany ha subrayado su carácter ambicioso y su deseo de llevar al Atlético de Madrid “donde merece estar”, en palabras recogidas en su presentación.
El ejecutivo balear ha iniciado contactos preliminares para el mercado de 2026-27, con la intención de construir un equipo alrededor de Julián Álvarez y elevar la competitividad del club en Europa.
La idea es clara: retener al delantero argentino y rodearlo de talento internacional que potencie la plantilla sin desvirtuar la identidad del Atlético de Madrid.

El blindaje de Julián Álvarez y la estrategia de permanencia
El Atlético de Madrid ya trabaja en garantizar que Julián Álvarez sea tratado como un activo estructural y no como una mercancía de mercado. Se pretende que su contrato y condiciones reflejen ese compromiso.
En ese contexto, Mateu Alemany defiende que el club no está dispuesto a negociar la salida del argentino como parte de su estrategia de vitrinas y competitividad.
La conjunción entre la ambición deportiva de Alemany y la llegada de Apollo proporciona los ingredientes necesarios para que el Atlético de Madrid se plantee subir un escalón en el fútbol nacional e internacional.
El reto que afronta Mateu Alemany no es menor: integrar a Julián Álvarez en un contexto de élite exige músculo, inteligencia de mercado y sentido estratégico, valores que el directivo madrileño ha mostrado en sus antecesores clubes.
A su vez, el Atlético de Madrid se convierte en banco de pruebas de una nueva era en la que los éxitos no sólo se miden en títulos, sino también en continuidad del proyecto y estabilidad institucional.
La estabilidad de Julián Álvarez es, según Alemany, el primer paso para construir un ciclo ganador. El club cree que el argentino, bien acompañado, puede disparar el rendimiento colectivo.
Los próximos mercados serán decisivos para comprobar si el plan de Mateu Alemany da frutos y si el Atlético de Madrid puede realmente cimentar un futuro competitivo duradero.
Mateu Alemany marca el compás del nuevo proyecto del Atlético de Madrid, con Julián Álvarez como vértice central, y la meta de transformar la ilusión en resultados palpables.
