
La Liga
Tal y como informa ‘Mundo Deportivo’, Joan Laporta está en pleno proceso de reconstrucción de ‘su’ Barça y, para ello, deberá hacer malabares. La grave crisis económica en la que está sumida el club obligará al máximo dirigente azulgrana a gestionar la plantilla con los mínimos costes posibles. La renovación de Messi también condicionará las cuentas, pero hay otros frentes que abordar y otras líneas del equipo que reforzar para contentar a Koeman, el cual parece que seguirá en el cargo.
Con el técnico holandés en el banquillo y con Dembélé en la rampa de salida, la prioridad en el plantel es renovar a Ansu Fati. En Can Barça se le considera el nuevo crack para la próxima década y el objetivo es blindarlo. Con contrato hasta 2022 (con opción de dos más), el FC Barcelona quiere ampliar el vínculo con el canterano hasta 2026. Se le subirá el sueldo y su cláusula llegará a una cifra imposible para futuros pretendientes.
El otro caso en el Laporta está trabajando es en el de Eric García. El zaguero queda libre en junio y todo apunta a que recalará en el Camp Nou. Como ya ocurrió con Piqué o Fábregas, otro hijo pródigo volverá a casa. Después de varias semanas en las que las negociaciones sobre su nuevo contrato se habían parado, el propio ‘Mundo Deportivo’ destaca que se han retomado y van por buen camino. El acuerdo será oficial en cuanto el mercado de fichajes de abra.
El sorprendente tercer movimiento
Y hay una tercera sorpresa. Tanto desde Francia como desde Barcelona se han hecho eco de unas informaciones en las que sitúan al club blaugrana detrás del joven Kays Ruiz.
Ex canterano de La Masía, el centrocampista franco-marroquí dejó la Ciudad Condal en 2015 para irse al Paris Saint-Germain, donde ya ha debutado con el primer equipo (ha participado en 7 encuentros de la Ligue1).
No obstante, parece que no tendrá muchas oportunidades entre el elenco de estrellas que entrena Pochettino y podría valorar la idea de regresar a Barcelona a coste cero. Acaba contrato en junio y sería otro fichaje gratis. Esta vez, para reforzar el centro del campo. El Niza es el principal rival con sus cantos de sirena.