UEFA Europa League
Antony se ha convertido en el gran protagonista del mercado estival en el Benito Villamarín. Tras semanas de negociaciones y un pulso con el Manchester United, el brasileño ya viste la camiseta del Real Betis como jugador en propiedad.
El esfuerzo de Antony por regresar a Sevilla ha sido evidente, forzando su salida de Inglaterra durante todo el verano. Finalmente, el acuerdo se cerró en 22 millones de euros por la mitad de sus derechos deportivos.
El Real Betis apostó fuerte por Antony, convencido de que su desequilibrio y velocidad pueden marcar diferencias en LaLiga. Los dirigentes verdiblancos lo consideran una pieza clave en el nuevo proyecto.
El Manchester United aceptó desprenderse de Antony tras meses de tensión con el futbolista. El extremo brasileño no encontraba su lugar en Old Trafford y su deseo era volver a un contexto donde se sintiera importante.
La cláusula de rescisión de Antony
Con el fichaje cerrado, ha salido a la luz que la cláusula de rescisión de Antony se sitúa entre 50 y 60 millones de euros. Una cantidad considerada accesible para clubes de mayor poder económico.
La cifra fijada para Antony genera debate, ya que, teniendo en cuenta su proyección, podría convertirse en un objetivo de equipos de élite más pronto que tarde. En Heliópolis confían en que su nivel aumente el valor del jugador.

El vestuario del Real Betis ha recibido a Antony como un refuerzo de lujo. El atacante está llamado a aportar desequilibrio en los metros finales y una pegada que el equipo echaba en falta.
Antony no solo supone un salto deportivo, también es un activo mediático para el Real Betis. Su nombre, ligado a grandes escenarios europeos, despierta expectación dentro y fuera del campo.
El plan de Pellegrini es darle confianza a Antony desde el inicio de la temporada. El técnico chileno considera que el brasileño puede adaptarse rápido a la dinámica y convertirse en referencia ofensiva, tal y como hizo en el curso pasado.
La inversión realizada en Antony representa una de las operaciones más importantes del club en los últimos años. La apuesta es arriesgada, pero la directiva cree que el talento del jugador lo compensa.
El futuro de Antony en el Real Betis dependerá de su rendimiento inmediato. Si logra consolidarse como figura en LaLiga, su cláusula podría quedarse corta frente al interés de grandes clubes europeos.
El entorno del jugador también ve con buenos ojos este regreso a España. Antony necesitaba reencontrarse con la continuidad y confianza que en Manchester no disfrutaba.
La afición bética espera que Antony sea capaz de ilusionar con su fútbol y devolver la inversión con goles y asistencias. En Heliópolis sueñan con que se convierta en uno de los nombres propios del campeonato.
Los próximos meses serán determinantes para medir el impacto real de Antony. Si cumple las expectativas, el brasileño no solo será ídolo en el Benito Villamarín, sino que podría estar en la mira de gigantes europeos dispuestos a pagar su cláusula.
