La revolución que prepara la Juventus para 2020

En el entorno de la Juventus de Turín, dos palabras resuenan como si de una atronadora tormenta se tratase: Champions League. Tras 23 años sin alzarse con la 'orejona', desde Turín la consecución de el más preciado trofeo de clubes en el mundo del fútbol se ha convertido en algo muy cercano a la obsesión. En esta línea, los italianos cerraron el verano pasado la contratación de uno de los mejores entrenadores europeos (Maurizio Sarri), el fichaje del central más prometedor del mundo (Matthijs de Ligt) y la manutención de un grupo liderado por el rey de la competición en esta última década, Cristiano Ronaldo.

No obstante, desde las oficinas 'bianconeri' no las tienen todas consigo, y continúan trabajando de cara a reforzar aún más una plantilla que permita al club optar a todo en esta temporada 2019/20. Partiendo de esta premisa, son varios los rumores que rodean al club turinés, que podrían variar ostensiblemente la plantilla que ahora mismo comanda el mago 'Sarri Potter'.

Las directrices técnicas y deportivas introducidas en el Big Data de la Juventus son claras: hay que reforzar los laterales y el medio del campo. Así, en los costados, la Juventus habría puesto su punto de mira en el Chelsea, y en más de un jugador. Podrían desembarcar en la Juve tanto el carrilero italiano Emerson Palmieri como Marcos Alonso. Ambos, con pocos minutos en la rotación de Frank Lampard, podrían buscar una salida y la Juventus ya habría mostrado interés en la contratación de ambos.

Por otro lado, en el mediocampo, el favorito para la dirección deportiva de Turín no es otro que Ivan Rakitic. El croata tampoco tiene sitio en el esquema de un Ernesto Valverde con predilección por Arthur y de Jong, por lo que la Juventus podría trasladar una seria oferta para cambiar de aires al actual jugador 'culé. Una Juventus que además tendrá que buscar aposento a Emre Can, evidentemente descontento con el club italiano tras no inscribirle en la Liga de Campeones.

Se vienen unos meses más que movidos por Turín, que sólo busca atrapar una nueva Champions League que acabe con la sequía europea de uno de los clubes más grandes de la historia del balompié.