Los problemas defensivos del FC Barcelona

Pese a que todavía estamos en los primeros compases de la temporada, los equipos de Primera División pueden ir sacando conclusiones con la intención de ir mejorando el funcionamiento pensando en las fases más importantes del curso, cuando se comienzan a definir quién gana los trofeos. Uno de ellos es el FC Barcelona que, pese a tener la mejor plantilla de La Liga Santander, está atravesando por muchos problemas en estos primeros compases de la 2019-20, lo que se ha definido como uno de los peores inicios de la época reciente del conjunto blaugrana en la división de elite y no es un dato menor.

El principal problema del conjunto blaugrana, pese a no poder contar en su totalidad con todas sus estrellas en ataque al mismo tiempo debido a las lesiones, es el sistema defensivo debido a que, en tan solo seis jornadas, han recibido diez goles, números que sorprenden dentro del proceso de Ernesto Valverde que, por lo menos en esta fase del juego, había confeccionado un conjunto sólido y al que le costaba hacerle goles. Y es que todavía no conoce que es sacar una portería en cero en lo que va de Liga, ni siquiera en el Camp Nou donde ha conseguido plenitud de triunfos ante rivales importantes como el Real Betis Balompié, Valencia CF y el Villarreal.

Más allá de las piezas, nombre por nombre es una de las mejores defensas del mundo, el inconveniente pasa por el funcionamiento y por cómo se comporta el colectivo en esa fase sin pelota donde, independientemente de donde se decida posicionarse, le cuesta mucho recuperar la pelota al Barcelona. Y es que se está notando una descoordinación a la hora de presionar en campo rival que, ante cualquier contrincante con mediocampistas capacitados para manejar la pelota con criterio, termina siendo penalizado con mucha facilidad. Un ejemplo claro es el Villarreal que, de la mano de un gran Vicente Iborra y un activo Santi Cazorla, destrozaron en muchas oportunidades a raíz de ese mal posicionamiento de las piezas dentro del terreno de juego.

El problema pasa porque a la hora de que los volantes, sea quien sea el intérprete, salte a presionar al contrincante con pelota se genera un espacio a sus espaldas debido a que la línea defensiva (Gerard Piqué, Clement Lenglet, Jordi Alba, Nelson Semedo, Junior Firpo) no sale a achicar y termina generándose ese espacio libre que termina siendo letal.

FOTO 1:

Sergio Busquets+Interiores saltan a presionar alto y los defensores no achican hacía delante para mantener corto el bloque

FOTO 2:

Iborra consigue filtrar con Gerard Moreno y este recibe con libertad para liderar el ataque:

Pese a que los rendimientos individuales no son los mejores, el funcionamiento defensivo del FC Barcelona no está siendo el más efectivo y, ante rivales de la misma talla, estos espacios terminan siendo penalizados con mucha más certeza. Ernesto Valverde se tiene que poner a trabajar desde la pizarra y buscar soluciones para dichos inconvenientes porque, con estos comportamientos colectivos, no les va a alcanzar para competir por el título de la Champions League, el principal deseo de la plantilla.