La mala fortuna ha acompañado a Club Atlético Osasuna desde hace bastante tiempo y continúa haciéndolo. Las lesiones que revisten bastante gravedad han golpeado frecuentemente a la entidad que comanda desde el terreno de juego Jagoba Arrasate. Muy buen papel del equipo rojillo en la pasada temporada ya en la élite del fútbol español, y este curso no ha comenzado nada mal pese a todas las dificultades que comentamos.
Sin ir más lejos, Arrasate ha perdido en su Osasuna a cuatro hombres importantes que deberían haber tenido un papel más que importante en el transcurso de la temporada para la entidad rojilla:
Los nombres
- Brandon Thomas: rotura de ligamentos. El ex del Mallorca es un ariete muy móvil y complementario que no estará disponible durante varios meses para su técnico.
- Chimy Ávila: la sensación de la temporada pasada de toda LaLiga Santander. Un delantero perfecto para el estilo de juego de Osasuna, para poder pelear todos los balones al espacio, un ariete con un ratio de goles por partido al alcance de muy pocos en el fútbol español. Pues para el ex de San Lorenzo de Almagro no fue una rotura, sino dos de ligamentos.
- Jonathan Calleri: el delantero argentino fue fichado para sustituir al anterior y poder contar con un ariete de un perfil similar. Pues bien, el ex de Boca Juniors también lesionado de gravedad, aunque en este caso por un esguince del ligamento de la rodilla. Otra baja más que importante para el conjunto de Navarra.
- Aridane: el central más titular para Arrasate, clave en el centro de la zaga de Osasuna. También lesionado por un esguince en el ligamento de su rodilla y fuera de los planes de Osasuna.