Guardiola, a emular su temporada 2008/09 en Manchester

La boca de todos los aficionados al mundo del fútbol está llena en estos momentos y de manera constante pronunciando dos términos primordialmente, reflejados en estas cuatro palabras: Leo Messi y Manchester City. El movimiento más sonado de lo que va de año, y probablemente de la década, podría revolucionar el panorama del fútbol actual a nivel mundial. Con este, Pep Guardiola consigue al jugador que se lo dio todo desde el terreno de juego. ¿Conseguirá construir en la estructura actual de este Manchester City a aquel Fútbol Club Barcelona mágico de la temporada 2009 y posteriores? Lo analizamos.

A la pieza principal la tiene, claro está. El mejor jugador de aquel conjunto, ese Leo Messi sobre el que ondulaba todo el talento del equipo y el 100% del juego ofensivo. Pero ahora, el resto de piezas es donde llega el problema. ¿Quiénes serán las piezas más interesantes que rodeen a la figura clave?

- ¿Xavi? Sin duda, la figura que no tiene recambio en el Manchester City. Ni un jugador con unas aptitudes parecidas a la de Xavi Hernández. Debería ser Thiago Alcántara, pero su fichaje se complica. Desde luego, el jugador que más se le podría asemejar. No será Gundogan.

- ¿Iniesta? Aquí sí que hay una figura parecida, que es la de Kevin de Bruyne. Pese a que los dos jugadores presentan cuantiosas diferencias en su estilo de juego, el nivel de ambos sí que es similar. Un jugador aportaba asistencias y mucho regate, mientras el otro mantiene el regate y aumenta sus llegadas al área contraria, con un disparo desde lejos decisivo.

- ¿Sergio Busquets? Aquí también encontramos una importante similitud. Rodri es ese ‘5’ que puede actuar en facetas de robo y distribución, colocación y toque de balón.

- ¿Samuel Eto’o? Pese a que los dos jugadores son muy diferentes, es imposible no pensar en Raheem Sterling como el camerunés. Atacantes que, podrían ser segundas espadas aportando grandes cantidades en cuanto a goles y asistencias.

- ¿Pedro Rodríguez? Ese atacante que entra desde el banquillo y aporta, acaba siendo decisivo. ¿Y si ese fuese Ferran Torres?