La gran diferencia entre el Valencia y su filial

El Valencia CF tiene un único motivo para sonreír a día de hoy: su filial va como un tiro en el grupo tercero de Segunda B. Pese a la dramática situación del primer equipo ‘ché’, el momento del Valencia Mestalla, -tal y como se conoce al segundo equipo blanquinegro-, es más que esperanzador y podría dar una alegría enorme a la entidad valencianista.

El bloque de Curro Torres, -que hoy ha ganado 2 a 1 al siempre incómodo Espanyol ‘B’-, marcha actualmente tercero en el complicado grupo 3, en posiciones de promoción de ascenso a la Liga 123, a 8 puntos del imparable líder, -el Barcelona ‘B’-, y con una dinámica totalmente opuesta a la del primer equipo: lleva un mes entero sin conocer la derrota.

Sin embargo, no sólo los resultados de su filial obligan al valencianismo a sonreír, sino también su capacidad para producir y formar talentos de futuro. Hombres como Carlos Soler, Antonio Sivera, Javi Jiménez, Toni Lato, Fran Villalba, Nacho Gil o Rafa Mir, -entre otros-, están llamados a ser parte importante del futuro del fútbol español. Y a día de hoy, siguen perteneciendo al Valencia.