El futuro de Gonçalo Ramos en el Paris Saint Germain (PSG) parece estar lleno de incertidumbre y dudas. A pesar de que el club ejecutó una opción de compra de 65 millones de euros en noviembre para asegurar su fichaje, su rendimiento en el campo ha generado interrogantes en las altas esferas del equipo, especialmente en el entrenador Luis Enrique.
El técnico asturiano no se opuso inicialmente al fichaje de Ramos, pero la realidad es que el desempeño del delantero portugués ha dejado mucho que desear en poco tiempo. Aunque el PSG no está considerando actualmente ponerlo en el mercado, según informaciones de L'Équipe, podrían considerar ofertas en el mercado de invierno, y no se descarta la posibilidad de que Ramos deje el club antes del 31 de enero.
Desde el 24 de noviembre, el internacional luso apenas ha tenido la oportunidad de jugar cinco minutos en la Ligue 1 y ha sido relegado al banquillo en tres de los últimos cuatro partidos de liga. Su único inicio reciente fue en un partido de la Copa de Francia contra el US Revel, que resultó en una victoria abrumadora para el PSG.
Luis Enrique, quien ha defendido públicamente a Ramos en varias ocasiones, ahora se muestra incierto sobre si el exjugador del Benfica puede rendir en partidos de alta exigencia, que es precisamente por lo que fue fichado por Luis Campos.
A pesar de la apuesta firme que hizo el consejero deportivo al fichar a Ramos, su flojo rendimiento, junto con el de Kolo Muani, también cuestionado en Francia, ha llevado a Luis Enrique a reubicar a Kylian Mbappé como delantero central, posición que no ocupaba la temporada pasada. Mbappé se ha convertido en la referencia del PSG, relegando a Ramos y Muani al banquillo.
No tiene la confianza del entrenador
El futuro de Gonçalo Ramos es incierto, y aunque el PSG confía en su potencial, Luis Enrique, según los minutos otorgados en los últimos meses, tiene dudas sobre su capacidad para competir en torneos como la Champions League.