
Premier League
El Manchester United vive uno de sus peores momentos deportivos en años. En plena deriva institucional y con una plantilla señalada por su bajo rendimiento, los ‘Red Devils’ intentan encontrar soluciones que les devuelvan la estabilidad. Tras la destitución de Erik ten Hag y el fichaje de Rúben Amorim, el equipo no ha logrado levantar cabeza. Marchan en posiciones discretas en la Premier League y su única esperanza de redención está en la UEFA Europa League, donde se enfrentarán al Olympique de Lyon en cuartos de final.
Uno de los grandes problemas del equipo ha sido la portería. La apuesta por André Onana no ha surtido efecto. El meta camerunés, fichado del Inter de Milán por más de 50 millones de euros, ha acumulado errores y críticas en sus dos temporadas en Inglaterra. Sus estadísticas no ayudan: 137 goles encajados en 92 partidos y una docena de fallos que han costado puntos valiosos. En contraste, el recuerdo de David De Gea sigue muy presente en Old Trafford.
Su gran nivel deja por los suelos a la directiva de Old Trafford
El internacional español, que se marchó en 2023 tras no renovar su contrato, ha resurgido con fuerza en la Fiorentina. Allí se ha convertido en una pieza clave para Raffaele Palladino, siendo uno de los porteros más fiables de la Serie A. Su rendimiento no ha pasado desapercibido y desde Mánchester ya se baraja seriamente su regreso.
De Gea termina contrato en junio, aunque el club viola activará una cláusula para extender su vínculo un año más. Aun así, la presión popular y el deseo del United por enmendar su error podrían abrir una negociación. El retorno del guardameta al Teatro de los Sueños no parece tan descabellado como hace unos meses. En Old Trafford saben que su marcha fue un fallo, y quieren recuperar lo que nunca debieron perder.