La afición del Mallorca quiere a este futbolista de patitas en la calle

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La Liga

1 X 2

Mallorca Osasuna

29/11/25 14:00:00

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Dani Rodríguez ha sido, durante años, el alma del Mallorca. Desde su llegada en 2018, el mediocampista gallego se convirtió en un símbolo en Son Moix, donde ha disputado 282 partidos oficiales.

Dani Rodríguez, a sus 37 años, acumuló 32 goles y 39 asistencias, cifras notables para un centrocampista. Su liderazgo dentro y fuera del campo lo elevó al estatus de ídolo entre los seguidores bermellones.

Dani Rodríguez, sin embargo, atraviesa su momento más delicado desde que aterrizó en la isla. Sus recientes declaraciones han sembrado una grieta entre el vestuario, el cuerpo técnico y la afición del Mallorca.

Dani Rodríguez, en el centro de toda la polémica

Dani Rodríguez no ocultó su malestar tras quedarse sin minutos en el Santiago Bernabéu. En los últimos instantes del encuentro, Jagoba Arrasate decidió dar entrada a Jan Virgili, recién incorporado al club.

Dani Rodríguez criticó públicamente la decisión del entrenador y cuestionó la presencia de Virgili, un jugador que, según él, ni siquiera había entrenado con el equipo. Sus palabras encendieron las redes sociales y las gradas de Son Moix.

Dani Rodríguez no midió el impacto de sus declaraciones. En vez de generar empatía, provocó una ola de indignación entre los seguidores, que ahora reclaman su salida mediante la rescisión del contrato.

Dani Rodríguez también ha perdido el favor de una parte del vestuario. Varios compañeros han salido en defensa de Jan Virgili, un joven que apenas empieza su carrera profesional y que no merecía ser señalado públicamente.

Dani Rodríguez, lejos de recular, ha mantenido su postura. Su enfado con Jagoba Arrasate ha quedado expuesto y la fractura con el entrenador parece difícil de recomponer a corto plazo.

Dani Rodríguez podría ver peligrar el brazalete de capitán, un símbolo que hasta ahora portaba con orgullo. La afición ha pedido que se le retire, considerando que ha faltado al respeto al club y a sus compañeros.

Dani Rodríguez, pese a su legado, está más cuestionado que nunca. Su trayectoria no borra el impacto de unas palabras que, para muchos, han manchado el final de una era que merecía ser cerrada con dignidad y respeto.