Premier League
El Liverpool vive con preocupación la situación de Harvey Elliott en el Aston Villa.
El joven centrocampista inglés, cedido el pasado verano, apenas ha tenido minutos y eso amenaza con frustrar la opción de compra de 35 millones de libras incluida en su contrato de préstamo. Lo que parecía una operación rentable para los ‘Reds’ podría acabar convirtiéndose en una pérdida económica considerable.
El plan del Liverpool se complica
El acuerdo entre el Liverpool y el Aston Villa establecía que la cesión de Harvey Elliott se convertiría en un traspaso definitivo si el jugador alcanzaba diez apariciones oficiales con el club de Birmingham. Sin embargo, tras un inicio prometedor, su participación se ha frenado en seco.
Elliott ha jugado solo cinco encuentros hasta ahora y, sorprendentemente, fue dejado fuera de la convocatoria en el último compromiso del Aston Villa. Desde septiembre, no ha sumado minutos en la Premier League, y lo más llamativo es que no se debe a una lesión, sino a decisión técnica.
Si esta tendencia continúa, el futbolista no alcanzará el número de partidos requeridos para activar la cláusula de compra, lo que dejaría al Liverpool sin los esperados 35 millones de libras.
Un fichaje que se enfría
En Birmingham, el papel de Harvey Elliott ha perdido fuerza. Pese a que el Aston Villa apostó por él para dar más dinamismo al ataque, el centrocampista no ha logrado adaptarse al estilo de Unai Emery. Las expectativas eran altas, pero su falta de impacto en el juego ha hecho que el entrenador le dé prioridad a otros futbolistas.
El problema para el Liverpool es que esta falta de protagonismo puede terminar costándole caro. El club contaba con esos 35 millones de libras como ingreso seguro de cara al próximo verano, una cifra clave dentro de su planificación financiera. Sin embargo, el bajo rendimiento del jugador ha puesto esa operación en entredicho.
Harvey Elliott, entre la promesa y la incertidumbre
A sus 22 años, Harvey Elliott sigue siendo una de las jóvenes promesas más valoradas de Inglaterra, pero su progresión parece haberse detenido. En el Manchester United o el Chelsea ya se han visto casos similares: jugadores con talento que no logran consolidarse al salir cedidos.
En el caso del Liverpool, la preocupación es doble: si el Aston Villa decide no ejecutar la compra, el jugador regresará a Anfield sin continuidad ni ritmo competitivo, lo que complicará su venta o su reintegración al equipo de Arne Slot.

Un problema financiero para el Liverpool
El posible fracaso de esta cesión representa un revés tanto económico como deportivo para el Liverpool. En lugar de recibir los 35 millones de libras previstos, el club podría quedarse con un jugador desvalorizado y con un mercado limitado.
Además, el mal momento de Harvey Elliott reduce su atractivo para otros equipos europeos. Su rendimiento irregular hace difícil que otro club iguale la cifra que el Aston Villa estaba dispuesto a pagar.
En Anfield confiaban en que esta operación serviría para financiar futuras incorporaciones y dar salida a un jugador con pocas opciones en el primer equipo. Sin embargo, todo apunta a que ese plan se ha torcido, y el Liverpool podría ver cómo se esfuman 35 millones de libras por la falta de minutos de su joven promesa.
La situación está lejos de resolverse, pero en los despachos de Anfield ya asumen que esta cesión no ha salido como esperaban. Si no cambia el rumbo, el Liverpool perderá una valiosa oportunidad de hacer caja y tendrá que replantearse el futuro de Harvey Elliott el próximo verano.
