James Rodríguez no tiene garantizada su continuidad en el Real Madrid, sin embargo, el colombiano se resiste a finiquitar su paso por el Real Madrid con el cartel de fracaso y quiere que Zidane le de una última oportunidad, para ello tiene varios objetivos.
Compromiso y profesionalidad
Ha sido su punto negro en la última temporada. James ha abandonado los buenos hábitos y no se ha mostrado interesado en el interés general del grupo. Zidane le exige mayor profesionalidad y James quiere volver por el buen camino.
Más aportación goleadora y definición
No es su mayor virtud, pero el Real Madrid necesita sus goles cuando Cristiano o Bale no están en buenas condiciones. Durante su primera temporada fue mucho más peligroso y contundente cerca del área, pero en la segunda no siguió con su trayectoria ascendente. Al igual que con Isco, se esperaba mucho más en ataque del colombiano.
Menor individualismo y más sentido táctico
James nunca ha asumido que en el Real Madrid es uno más del equipo. Acostumbrado a asumir el rol de líder en la selección colombiana, no ha sabido asociarse con sus compañeros para ayudar a sacar lo mejor de ellos, sin duda, puede hacerlo. El caso Bale es el mejor ejemplo, ya que el galés sí ha vivido una reconducción en su juego y ha asumido su rol.