Marcos Llorente es, desde el jueves por la tarde, nuevo jugador del Atlético de Madrid. Descartado por Zinedine Zidane a pesar de su buen hacer durante el paso de Santiago Solari por el primer equipo blanco, el joven mediocentro madrileño ha decidido hacer las maletas, abandonar el club de su corazón y marcharse a su eterno rival. En mi opinión y por varias razones, un enorme acierto suyo mismo y de Diego Pablo Simeone.
Modelo de juego: Según dicen algunos medios, los técnicos del Real Madrid le consideraban un futbolista con mucho menos margen de mejora que Fede Valverde, por ejemplo. Y es que Llorente es lo que es, un mediocentro tremendamente agresivo sin balón, con una capacidad de robo brutal, pero más bien correcto en posesión de éste. Y por cómo suele jugar Simeone, el Atlético es el equipo ideal para él. Al igual que lo fue en su día el Alavés de Pellegrino, para que nos entendamos.
Ausencia de competencia: Si en el Madrid los rivales que tenía en su mismo puesto eran auténticos monstruos, en el Atleti la situación es bastante diferente. Bien es cierto que están Koke y Thomas, con la presunta marcha de Rodri al ‘Cholo’ le faltaba ese pivote posicional que aporte más contención que llegada. Y ese pivote es desde el jueves Marcos Llorente.
Rol en el equipo: Con todo lo dicho anteriormente queda claro, pero si juntamos los dos puntos anteriores nos queda una fácil conclusión, y es que Llorente será muy importante a las órdenes de Simeone. No sé si el Atlético cambiará el sistema, si llegará alguien más o si Koke volverá a jugar por fuera, pero lo que parece claro es que el excanterano blanco será uno de los hombres fuertes del ‘Cholo’.