El Real Madrid, tras la marcha de Cristiano Ronaldo, se ha encontrado con un panorama imprevisto en el mercado de fichajes, teniendo que verse obligado a realizar un fichaje estrella para suplir al portugués, algo que en los últimos años no se ha producido debido al cambio en la gestión de los fichajes.
La falta de tiempo de aquí al cierre de mercado obliga al club blanco a moverse rápido, pero aun así, tiene un serio problema, ya que la desesperación para hacerse con un jugador de primer nivel mundial hará que tenga que pagar por encima del precio que pudiera tener cualquier jugador en condiciones normales.
Clubes como el Chelsea, Liverpool o Tottenham piden más de 200 millones por sus estrellas, sabedores de que el Madrid necesita un crack de primer nivel para seguir en la cima del fútbol europeo, con lo que la pelota queda en el tejado del cuadro merengue, que se enfrenta a su mercado de fichajes más difícil de los últimos tiempos.