
La Liga
El Barcelona se encuentra en una encrucijada crítica en cuanto a la elección de su próximo entrenador. Tras el anuncio de Xavi Hernández de su partida al final de la temporada, el presidente Joan Laporta está en busca de un reemplazo capaz de enderezar un proyecto que atraviesa momentos turbulentos. La escasez de resultados positivos, la difícil situación financiera y la creciente presión de la prensa y la afición han llevado a Xavi a tomar la decisión de alejarse del club de toda su vida. Esto ha planteado un desafío crucial para el Barça: encontrar un técnico experimentado en lugar de optar por alguien de la casa.
La lista de candidatos es extensa, con opciones que van desde entrenadores con amplia experiencia hasta aquellos con menos recorrido en la élite del fútbol. Entre las miradas se dirigen hacia la escuela alemana, donde figuran nombres como Thomas Tuchel y Hansi Flick. El sueño de traer a Jurgen Klopp es tentador, pero se antoja complicado, ya que el entrenador alemán anunció su intención de no ocupar un banquillo en la temporada 2024/25. Además, se barajan posibilidades como el retorno de Pep Guardiola o Luis Enrique, e incluso la promoción de Rafa Márquez desde el filial.
Uno de los favoritos de Laporta
Sin embargo, en las últimas horas, ha surgido un candidato con fuerza: Marcelo Gallardo, el exitoso entrenador argentino. A pesar de no contar con experiencia en Europa, Gallardo ha cosechado numerosos éxitos en Sudamérica, especialmente al mando de River Plate, donde ganó la Copa Libertadores en dos ocasiones y se coronó campeón argentino. Actualmente, dirige al Al-Ittihad saudí, pero su contrato incluye una cláusula liberatoria que le permitiría unirse a un club europeo en caso de recibir una oferta.
Gallardo, tras dejar su país a finales de 2022, se dedicó a formarse en el fútbol continental, visitando a los mejores entrenadores del mundo para prepararse adecuadamente para asumir un banquillo de alto nivel. A pesar de recibir múltiples ofertas de Inglaterra y España, incluyendo al propio Barcelona antes de la llegada de Xavi, ninguna lo convenció lo suficiente. Su experiencia lidiando con la exigente afición de River y su histórico papel como jugador de la albiceleste heredando el número 10 de Maradona podrían hacer que la presión en el Camp Nou sea más manejable para el "Muñeco".