El Valencia CF ha marcado un límite claro en el calendario: el 8 de julio. Para entonces, el club espera haber cerrado el fichaje de Rafa Mir, evitando así repetir los errores de temporadas pasadas, donde las negociaciones se extendieron hasta límites desesperantes. El delantero murciano, deseoso de regresar a Mestalla, enfrenta ahora una ventana crucial donde las partes deben concretar un acuerdo que satisfaga tanto al jugador como al club.
Desde la dirección deportiva che, se ha intensificado el interés en Mir, reconociendo la complejidad de la operación debido a las condiciones impuestas. Aunque inicialmente hubo dudas sobre la disposición del futbolista a renunciar a parte de su salario para facilitar el traspaso, recientes informaciones indican que Mir está dispuesto a hacer sacrificios económicos, incluyendo incentivos por rendimiento, para allanar el camino hacia su retorno.
El Valencia, al parecer, ha puesto sobre la mesa una propuesta de cesión con opción a compra que no implicaría costes salariales adicionales significativos para el Sevilla, actual club de Mir. Esto representa un gesto significativo por parte de los valencianistas, quienes buscan ajustarse estrictamente a su límite salarial sin comprometer su estabilidad financiera.
Tal y como se cuenta en EstadioDeportivo, Rubén Baraja, entrenador del Valencia, ha establecido un ultimátum claro a la directiva: el fichaje de Rafa Mir debe cerrarse antes del inicio de la pretemporada, el 8 de julio, para evitar distracciones innecesarias y garantizar una preparación adecuada para la próxima temporada.
Con estas premisas, las negociaciones están en marcha y se espera que en los próximos días se llegue a una conclusión definitiva. Si bien hay optimismo en ambas partes, la incertidumbre persiste hasta que se formalice el acuerdo. El Valencia, consciente de la necesidad de reforzar su línea de ataque, tiene como prioridad resolver este fichaje sin demoras adicionales, mostrando así su compromiso con una planificación deportiva eficiente y sin sobresaltos.