Las últimas declaraciones de Sergio Busquets a ESPN en las que aseguraba que sólo su mujer y Pep Guardiola le harían cambiar de aires y dejar el FC Barcelona han vuelto a poner en el primer plano la renovación del canterano culé. Pese al interés de París Saint-Germain y Chelsea, el medio quiere quedarse pero también quiere que Bartomeu cumpla con lo que le prometió hace tan sólo unas semanas.
El jugador teme que se alarguen las negociaciones y lleguen al periodo estival donde el conjunto azulgrana estará demasiado "liado" tratando de incorporar jugadores a su plantilla y Busquets podría ver como se aplaza para la siguiente temporada su mejora de contrato.
En todo caso, lo que esperan él y su agente, Josep Maria Orobitg, es que las conversaciones se inicien cuanto antes y que no se deje pasar el tiempo. Igual que se va avanzando con Neymar pese a que su renovación no se rubricará oficialmente hasta el 1 de julio, Busquets y Orobitg quieren que se negocie ya con ellos.