El Sevilla FC se encuentra inmerso en una profunda reestructuración de su plantilla de cara al próximo mercado de verano. Después de una temporada decepcionante en la que no lograron clasificarse para ninguna competición europea y luchan por mantenerse alejados de la zona de descenso a la segunda división, el club ha decidido tomar medidas drásticas para revertir la situación.
El entrenador Quique Sánchez Flores y el director deportivo Víctor Orta han identificado a siete jugadores que no han estado rindiendo a la altura de las expectativas y que no entrarán en los planes del equipo para la próxima temporada. Estos jugadores son Adnan Januzaj, Marcao, Tanguy Nianzou, Rafa Mir, Joan Jordán, Mariano Díaz y Lucas Ocampos.
La decisión de llevar a cabo una limpieza de vestuario responde a la necesidad de rejuvenecer y fortalecer el equipo, buscando jugadores que estén comprometidos con el proyecto y capaces de llevar al Sevilla de vuelta a la élite del fútbol español y europeo.
Se trabajará conjuntamente para no repetir errores
Quique Sánchez Flores y Víctor Orta trabajarán estrechamente para asegurarse de que no se repitan los errores de esta temporada. Ambos son conscientes de la importancia de conformar un equipo competitivo y equilibrado que pueda aspirar a regresar a las competiciones europeas y evitar problemas en la lucha contra el descenso.