Hace un año, Edin Dzeko era un jugador discutido en la AS Roma. El delantero centro bosnio no es un hombre que brille por la plasticidad de sus movimientos en el terreno de juego. Su mayor virtud es la eficacia en el remate a puerta, y la falta de acierto le convertía en el centro de las críticas.
Sin embargo, el club romano confió en Dzeko. Abonó la cantidad pactada con el Manchester City como opción de compra (11 millones de euros) y le mantuvo en la plantilla. Unos meses después, los números de Dzeko son espectaculares. Tras la clara victoria de la Roma en Villarreal (0-4), el delantero bosnio ya suma 28 goles en los 34 partidos oficiales que ha disputado esta temporada: 18 en la Serie A, ocho en la Europa League y dos en la Copa de Italia.
Dzeko se ha convertido en la indiscutible referencia ofensiva de la Roma. Su historia demuestra que la paciencia de un club con un jugador puede suponer un gran ‘fichaje’ a posteriori. El contrato de Edin se extiende hasta junio de 2020. Tres años más en los que la Roma espera disfrutar de sus goles.